¿Quién no ha comido pierna de cordero al horno? Es más, ¿quién no la ha comido en navidad? Es la época más común para hacerlo. No hace falta comerla exclusivamente en estas fechas, pero por tradición y costumbre, es lo usual.
– Una pierna de cordero
– Vino blanco
– Una cucharada de manteca
– Tomillo
– Orégano
– Comino
– Pimienta negra
– Pimentón
– Dientes de ajo
Lo primero que debemos hacer es precalentar el horno a 180º, y mientras se calienta tenemos que hacernos con un mortero, dónde vamos a meter todas las especias y ajos, incluyendo la piel, y procedemos a mezclarlo y machacarlo todo.
Hay que colocar la pierna de cordero en una bandeja, y la embadurnamos la pata con nuestra mezcla que tenemos en el mortero, y con la manteca. Una vez hecho esto, la metemos en el horno, y la damos sabor, echando por encima un vaso de vino blanco.
Ahí lo dejamos asarse durante una hora aproximadamente, y cada 15 -20 minutos, le damos la vuelta y lo empapamos con su propia salsa, para evitar que se quede seco.
Cuando la pierna de cordero esté preparada, cogemos la salsa y la echamos en un bol, añadiendo un poco de harina, y luego pasamos la batidora, evitando así que queden grumos. Cogemos un chino para colar el caldo o salsa que estamos preparando y después la hervimos, añadiendo agua si fuera necesario.
Antes de empezar a comer la pierna de cordero, echamos la salsa por encima, y es entonces cuando está listo y preparado para servir y comer.
Los acompañantes ideales sueles ser las patatas, cortadas en rodajas finas o con patatas panaderas. Llegados a este punto, solo queda disfrutar del plato que hemos preparado.